miércoles, 8 de febrero de 2012

Aquella Tarde


Aquella tarde que te vi, y  entraste en mi, entre tu cuerpo, tus caricias, tus olores, aquella tarde creo que volví a saber lo que era la vida, volviste a despertar en mi el morbo de lo prohibido, lo real, lo imaginario, la locura y la pasión. Supongo que es la locura de la que nunca me arrepentiré. Te convertiste en mi droga directa al corazón.
No paré, pensé que podía llevar las dos vidas a la vez, pensé que podía ser una buena madre y también buena amante, pero todo me superaba porque cada segundo que volvíamos a tener una pasión, una locura y unos sentimientos enormes en común no quería vivir más en una mentira. Los dos habíamos tardado mucho tiempo en encontrarnos, acordamos y pensamos que había sido así por culpa del destino y que no nos encontramos cuando debíamos haberlo hecho antes de llegar a esto. Nunca es tarde si la dicha es buena.
Quería sentirme viva solo contigo, cuando él me besaba, me tocaba y no sentía nada, solo era cariño y lo he querido, lo he amado mucho pero me he dado cuenta de con quién quiero sentirme viva, de quién me hace sentir viva. Puede que no dure, pero ahora mismo solo quiero estar entre tus besos, entre tus brazos y  despertarme contigo.
Te volvía a amar como si fuera una adolescente llena  de juventud, Te amé con mi sabiduría y experiencia pero también con las hormonas de una mujer algo loca. Vale la pena algunas historias tienen finales felices, pero otras no.. Y por qué? Miedo a perder algo seguro, miedo a que lo que supuestamente nos hará felices se desvanezca al siguiente día.
Supongo que todas las posibilidades de querer estar a tu lado se reducen a nada esto es irreal.............

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